El árbitro del clásico penquista Francisco Gilabert denunció fuegos artificiales y jugadores con distinta vestimenta en la visita.
Deportes Concepción venció por dos goles a cero a Fernández Vial en el clásico penquista y este día miércoles salió a la luz pública el informe del juez Francisco Gilabert, dónde consignó lanzamiento de fuegos artificiales y vestimentas de otros colores en el cuadro lila:
«Desde el sector de la barra del Club Deportes Concepción, se encienden bengalas y fuegos artificiales en el minuto 90». Fue la observación que estipuló Gilabert en su informe, acusando al cuadro lila pero no así al elenco local donde se produjo la misma situación.
La otra observacion del árbitro fue el distinto color de la vestimenta de los jugadores: «La mayor parte de los jugadores de Deportes Concepción, utilizan sus medias cortadas (lilas) y la calceta de abajo no es del mismo color (blanco), vulnerando el artículo 4.2 de las reglas del juego».
¿ A QUÉ SE ARRIESGA DEPORTES CONCEPCIÓN?
Los hinchas lilas pueden respirar tranquilos ya que no hay una sanción deportiva ni importante para sus pretensiones ya que solo podrían ser castigado con la prohibición del ingreso de elementos de animación (bombos) y una posible multa económica por ambas observaciones.
Yo estuve en el estadio y ese arbitrillo no merece dirigir un clásico de esa magnitud porque le quedó grande y se vio todo el partido la preferencia por Fernández vial porqué su barra lanzó muchos más juegos artificiales durante el partido y no cobro la mayoría de las faltas que hacía el cuadro aurinegro a los lilas al igual que los líneas de juguete, todos coludidos en contra del león de collao. Pero la justicia de arriba es la que importa.
La ANFP debería sancionar a ese payaso de Gilabert, arbitrillo de barrio haciendo preferencia por su equipo sin poder distinguir su trabajo, ahí se ve lo poco profesional del tipo, un mala clase.
Esto es enserio? Buscando la quinta para al gato? Arbitrillo vendido y poco profesional. La clase de árbitros que tenemos para dirigir el fútbol profesional es una verdadera vergüenza. Ojalá no dirija más un partido de fútbol.
Saludos cordiales